Ayer
presentamos una nota sobre la posibilidad de que los jefes dejen que los
trabajadores fijen su propio sueldo, hoy analizamos cuánto es el sueldo inicial
promedio en las empresas, el diario La Nación publica una nota al respecto.
Leemos
en el artículo:
Cuánto
quieren ganar los argentinos que buscan trabajo hoy
Delfina
Torres Cabreros
La
plataforma de búsqueda de empleo Bumeran publicó un listado en el que recopila
cuáles son los salarios pretendidos de los candidatos que entran a buscar
trabajo. Si bien la dispersión es alta y, según los especialistas, refleja
mejor lo que los candidatos "creen que valen" que el nivel de
salarios real de la economía, el documento deja ver que los argentinos que
buscan trabajo hoy en los 10 puestos más consultados están dispuestos a
aceptarlos por montos que van de $21.098 a los $40.805.
Se
trata de posiciones diversas, por lo tanto, los valores de las remuneraciones
varían hasta en un 93,4%. Según el informe, que corresponde al período de julio
de 2019, el salario más bajo buscado es para el puesto de vendedor de comercio
y el más alto, para el de analista funcional. "El analista funcional está
dentro del área de sistemas. Es esa persona que ocupa el rol de intermediar
entre el área de negocios y los desarrolladores, por ejemplo. Entonces, este
informe permite ver que, dentro de la pirámide salarial las pretensiones más
altas están en las áreas de tecnología, donde hoy hay más demanda que
oferta", apuntó Ivana Thornton, directora de Career de Mercer.
Para
la especialista, puede que las remuneraciones pretendidas estén afectadas por
el contexto recesivo. "Cuando hay una crisis las personas resignan salario
por la posibilidad de acceder a un puesto de trabajo. Puede pasar que uno tiene
un pretensión, pero cuando el mercado no cumple uno decide avanzar igual,
porque acceder al mercado tiene en sí un valor relevante", precisó.
El
director general de la consultora en recursos humanos Ghidini Rodil, Matías
Ghidini, consideró que es difícil comparar distintos sectores, donde hay mucha
diferencia por tipo de sector la línea de paga. "Además, no queda claro si
la persona piensa en monto bruto o neto, si le pone el bono o no", apuntó.
Para Ghidini, "los valores están puestos en función de lo que cada persona
considera que es su jerarquía, cuando la referencia real es la tarea. Uno tal
vez piensa que es jefe, pero hace tareas de gerente. No se analiza el matching
de la posiciones", relativizó.
Para
el especialista, la remuneración monetaria es solo uno de los elementos que se
consideran a la hora de decidir tomar un trabajo. "Deberías guiarte no
solo por remuneración sino todas las variables que hacen la propuesta de valor.
Qué trabajo vas a hacer, cultura de la compañía, proyectos, jefes, aunque sí es
cierto que cuando hay escasez de trabajo un candidato tiene necesidad de
trabajar puede resignar parte de su expectativa salarial", coincidió.
Según
apuntó, en el mercado existe una idea cristalizada acerca de cuán superadora
debería ser una oferta salarial para impulsarte a dejar un puesto de trabajo.
"Se supone que debería ser del 30% más, pero yo no comparto. La
expectativa la vas construyendo a medida que avanzás en el proceso de búsqueda
y tenés más información. Tal vez por la misma remuneración que percibís en un
lugar te vas a otro, porque valorás elementos relacionados con la cultura de la
empresa o el clima de trabajo. Uno tiene que trazar el piso de lo que necesita
para vivir y, sobre eso, ponderar otras variables", añadió.
Punto
de partida Vs. punto de llegada
El
informe revela, además, que el salario requerido por las mujeres es 14%
inferior al que piden por los varones para los mismos puestos, y la brecha se
agranda en la medida que se escala en puestos jerárquicos. "Está estudiado
desde la psicología y desde las organizaciones que estudian problemáticas de
diversidad e inclusión que a las mujeres nos cuesta más negociar salarios que a
los hombres, probablemente por un tema cultural, de educación. En el momento en
que recibimos una oferta nos sentimos con menos autoridad para contraofertar o
plantear una conversación", señala Thornton.
La
especialista considera que muchas mujeres sienten que una nueva oferta de
trabajo es un "punto de partida" y que necesitan demostrar que son
buenas en su trabajo y lo merecen, lo que influye a la hora de negociar el
salario. Los varones, en cambio, suelen ver las nuevas oportunidades como
"puntos de llegada". "El razonamiento de ellos es: por lo bueno
que soy, ya me gané esto". "Se está trabajando mucho en el mercado
laboral todo el tema de trabajar los sesgos inconscientes, revalorizar a la mujer.
Hacerle saber que tiene el mismo derecho a plantear sus expectativas, a
negociar", agregó.
La
pretensión salarial, puesto por puesto
- Vendedor de salón: $21.098
- Recepcionista/ telefonista: $21.594
- Asesor comercial: $24.873
- Empleado administrativo: $24.965
- Asistente de contaduría: $26.319
- Empleado de contaduría: $27.339
- Ejecutivo de cuenta: $28.593
- Analista Programador: $31.407
- Analista contable: $33.160
- Analista funcional: $40.805
Páginas
consultadas:
Enlaces relacionados:
No hay comentarios:
Publicar un comentario