Cuando
hablamos de comunicación, nos referimos en general al dialogo que tienen las
personas, sin embargo existen otras manera de comunicarse y el chisme es una de
ellas.
Tratada
en general como un género menor, el chisme puede formar parte de lo que Robbins
(1995) denomina Comunicación Informal Organizacional, aquella comunicación que no es definida por la
jerarquía estructural de la organización, y que muchas veces entorpece la
comunicación formal y por lo tanto, influye el comportamiento organizacional de
los empleados.
Este
artículo aparecido en el diario Página 12, nos brinda una interesante mirada
psicoanalítica del tema: “No se si debería decírtelo…”
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